América del sur posee la flora y fauna más variada del mundo, enfrentando amenazas como el cambio de uso de suelos, el cambio climático, el sobrepastoreo, la deforestación, la degradación de los bosques y las actividades extractivas.
Los proyectos extractivos tales como los proyectos mineros generan un gran impacto, no solo en las comunidades, sino también en el hábitat de muchas de las especies animales y vegetales. La construcción de campamentos para el personal es una de las causas por las que la fauna silvestre se ve obligada a emigrar retirándose a zonas más alejadas y aisladas; sin embargo, existe un porcentaje que logra adaptarse y mantenerse en espacios cercanos, aunque dejan de mantenerse como fauna silvestre.
La fauna de los andes sudamericanos en zonas precordilleranas de extracción cuenta con una amplia variedad de especies, siendo los más representativos los auquénidos, muy importantes para la economía de las comunidades andinas. También se encuentran vizcachas, tarucas, chinchillas, zorros andinos, murciélagos y el cóndor. Siendo éstos los agentes afectados por los proyectos extractivos.
La construcción de carreteras y caminos, los centros de recolección, las plantas de tratamiento de residuos sólidos, los relaves, las plantas de tratamiento de aguas residuales, la construcción de plantas desalinizadoras, la reutilización de las aguas grises residuales de los diferentes procesos para reducir requerimiento hídrico, etc., generan para la fauna el riesgo de consumir aguas contaminadas, ingerir alimentos no aptos incluso desperdicios que ponen en riesgo la vida de los animales.
Las empresas mineras invierten fondos y recursos para mitigar o reducir estas condiciones de riesgo para la fauna. Protab cuenta con una amplia cartera de soluciones tecnológicas, las mismas que pueden ser aplicadas y adaptadas a diferentes necesidades para contribuir en la protección de la fauna silvestre. Por ejemplo, la utilización de cámaras biespectrales o cámaras de alta definición potenciadas con sistemas de energía autónoma (SAEC – SAEC PRO) pueden detectar y alertar la existencia de fauna silvestre en una condición de riesgo, hacia un centro de monitoreo centralizado, el cual puede accionar sistemas de alerta, tales como sirenas, luces, etc. Con lo que se evitaría la exposición de estos animales a zonas de alto riesgo o contaminadas, al establecer cercos perimétricos de seguridad alrededor de estas áreas.
Las ventajas del uso de cámaras biespectrales nos permite identificar o detectar especies sigilosas o de hábitos nocturnos que no serían identificadas por cámaras solo de alta resolución. Permitiendo conocer los patrones de comportamiento de las especies y de esta manera poder adaptar los espacios.
Un centro de monitoreo centralizado o control room, permite a los operadores monitorear la información recibida, en este caso video y datos, y poder reaccionar de manera inmediata ante emergencias o eventos.
Parte de los compromisos de la industria es mantener y construir relaciones saludables con el entorno donde operan, es importante mantener la responsabilidad ambiental y contribuir a reducir el impacto que nuestras acciones generan. Protab se adhiere a este compromiso, desarrollando soluciones tecnológicas que permiten sostenibilidad de la operación a largo plazo y la protección de la fauna silvestre de la zona de la mano con nuestros clientes.